El francés ha vivido ante el City su primera gran noche en el Bernabéu con un hat – trick que será recordado para siempre

Tres tantos a la altura de muy pocos

El galo tenía una única intención hoy: destrozar al Manchester City y dar un golpe encima de la mesa. Y así lo hizo. Tres goles de bellísima factura vuelven a situar en el mapa de los mejores a un jugador que nunca llego a salirse del mismo. «Kiki» rompió el plan de Guardiola en los primeros compases del partido gracias al pase de un monumental Asencio. El galo, como acostumbra, no se puso nervioso para mandar el balón a la jaula de Ederson.

El segundo tanto, por si fuera poca la exhibición futbolística del equipo, Kylian decidió ponerse el traje de mago para sentar a Gvardiol y hacer el 2-0 para tumbar a un City «inútil». La guinda del pastel y por consiguiente, el hat – trick del galo fue una jugada que solo pueden hacer los elegidos. Desde la inhabitada bandas derecha, Kylian se fue a por Foden con una bicicleta espectacular y definió a la cepa del poste derecho de Ederson.

A fuego lento, pero «letal»

A Mbappé le ha costado. Y mucho. Muchísimo. Pero ya está aquí. Para llegar a días como el de hoy se ha peleado hasta consigo mismo, como reconoció en San Mamés. Pero le sobra la mentalidad de ganador, y por ello hoy podemos decir que Kylian ya está aquí.

Su gol y buen partido en el Etihad fueron el almuerzo del banquete que se ha visto en el Bernabéu. Al margen de los goles, se ha mostrado muy activo durante todo el encuentro tanto en tareas ofensivas como en misiones defensivas. Ya lo dijo Luis Pérez. El lateral derecho del Real Valladolid le confesó al francés que estaba «letal» y no se equivocó. Así que por fin podemos decir aquello de: este Mbappé SÍ es Mbappé.

Imagen principal: Photo by Robbie Jay Barratt – AMA/Getty Images

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